Y por fin, en la tarde del 5 de enero llegó el prólogo del momento más esperado, la Gran Cabalgata de Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente, ocasión en la que, a pesar de la lluvia y de la más que desapacible meteorología, Melchor, Gaspar y Baltasar recorrieron las principales calles de Torrelodones acompañados por lujosas carrozas y con una escenografía elaborada por la asociación cultural Torrearte.
En esta ocasión, y como siempre, la escenografía de los tres Reyes Magos vino cargada de simbología. Melchor, el “Rey de la Luz”, y su séquito representaban el cosmos, los planetas y las constelaciones inspirados por la Estrella de Belén. Las carrozas que le acompañan estaban repletas de estrellas, la Luna, el Sol y los planetas, las constelaciones y los signos del zodiaco. 2. Gaspar representa la naturaleza y la tierra de donde se obtienen el oro, el incienso y la mirra. Irá acompañado de carrozas llenas de plantas y bellos animales vertebrados e invertebrados. Por último, Baltasar estuvo acompañado por valores universales como el amor, la solidaridad, el respeto, la bondad, la igualdad, la justicia, la valentía y la honradez, trayendo a los niños los regalos que recibirían esa noche.
De esta manera la cabalgata, prólogo de la noche más esperada, recuperó la tradición con música, baile y luces, todo un espectáculo que despertó las sonrisas de los niños haciéndoles olvidar las dificultades que han atravesado durante los últimos tiempos. Cada uno de los Reyes estuvo acompañado por carrozas, pajes y séquitos que con su lujo y magia deslumbró a los asistentes.




















